MI FIDELIDAD ES PARA MI AMIGO JESUS. 2020.23
- Iglesia Piedra Viva
- 3 may 2020
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Citas Bíblicas:
Salmo 101: 6 y 7
Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo; El que ande en el camino de la perfección, éste me servirá. No habitará dentro de mi casa el que hace fraude; El que habla mentiras no se afirmará delante de mis ojos.
Así como David dijo que mantendría sus ojos en «los fieles de la tierra» y que el escogería como modelos y amigos a quienes son veraces y piadosos. Nosotros debemos seguir su ejemplo, además debemos tener en cuenta que nuestros amigos tienen una profunda influencia en nuestra vida, aunque muchas personas suelan decir que están fuertes en sus principios; en algunas ocasiones nos hemos dejado influenciar por amistades para bien o para mal. Asegúrese en mantener su mirada en los que son fieles a Dios y su Palabra.
Todos nosotros, necesitamos estar con personas buenas, agradables, confiables, pero nada ni nadie puede igualarse a Dios. Él desea que estemos con Él, nos brinda su Paternidad, quiere darnos su amistad, pero pide de nosotros que seamos fieles, leales y confiables; todo lo contrario a traidores, desleales e infieles. El Señor dice: Que sus ojos pondrá en los fieles; está hablando de ti y de mí para que lo sirvamos de corazón y seamos afirmados en su casa. Ha llegado la hora de ser fieles, adelante, Dios cuenta con nosotros, nunca le defraudaremos.
ORACIÓN:
Mi casa y yo te serviremos desde hoy y para siempre, decreto que soy fiel, confiable y leal a tu presencia. Mi Dios cuenta conmigo, soy llamado (a) por Él, sus ojos están puestos sobre mí, El Altísimo, me ve, me oye y tengo su respuesta, no temeré al enemigo. Mi familia ha sido afirmada por Dios. Hoy confieso que en la integridad de mi corazón andaré en medio de mi casa. Delante de mi ojos está lo justo, lo puro, lo santo, lo limpio y lo de buen nombre. Todo corazón perverso se apartará de mí. No conoceré al malvado; la corrupción e injusticia nunca entrarán a mi casa, libre soy de toda altanería y perversidad. Mi familia y yo estamos bajo tu misericordia, entendemos tu camino, te seguiremos y serviremos fielmente. Hoy confieso que aborrezco el mal y todo lo que desagrada a mi Dios. Tu luz está sembrada en mi casa, se fue toda tiniebla. Hoy es tiempo de alegría. Mis hijos florecerán como la palmera; crecerán como cedro en el Líbano, plantados están en la Casa de Dios, Aún en la vejez fructificarán; estarán vigorosos todo el tiempo de su vida, Amén y Amén.
DIOS BENDIGA NUESTRO ALTAR FAMILIAR
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